La Esquina de San Jacinto: entre lo religioso, lo político y lo comercial.
La Esquina de San Jacinto, Mercado de San Jacinto o Plaza El Venezolano, es un espacio comercial, turístico y recreacional en la populosa Ciudad de Caracas, esta cuadra está comprendida al norte por la esquina de San Jacinto y la esquina de Doctor Paúl y hacia el sur por la esquina de Sociedad y la esquina el Chorro. La historia de esta cuadra la podemos dividir en tres momentos claramente definidos ajustado a la época:
Por: Javier Alfredo Villamizar López
La Esquina de San Jacinto, Mercado de San Jacinto o Plaza El Venezolano, es un espacio comercial, turístico y recreacional en la populosa Ciudad de Caracas, esta cuadra está comprendida al norte por la esquina de San Jacinto y la esquina de Doctor Paúl y hacia el sur por la esquina de Sociedad y la esquina el Chorro. La historia de esta cuadra la podemos dividir en tres momentos claramente definidos ajustado a la época:
1.-Religioso.
2.-Político.
3.-Comercial, Monumental y Recreativa.
¡Si la naturaleza se opone lucharemos contra ella y haremos que nos obedezca.!... Valiente frase del EL Libertados Simón Bolívar pronunciada en la Plaza de San Jacinto en 1812 |
Como primer momento, esta
cuadra nace durante la ocupación española, luego del desplazamiento
de las cultura originarias del valle de los Toromaimas (hoy conocido como centro de Caracas), este cuadrante fue cedido a la orden de los Dominicos, orden predicante (monásticos y
aostólicos), mendicante y de línea escolástica, donde perteneció Santo Tomás de
Aquino, resumían su acción en tres palabras: Laudare,
benedicere,
praedicare, sin embargo sus
principios básicos se rigen bajo la tradición católica impulsada por San Agustín
de Hipona, patriarca y uno de los cuatro doctores de la iglesia católica.
Se caracterizan por el rezo
a la virgen y el rosario, (las veritas), esta orden fue fundada por Santo Domingo
y fue una de las primeras que se les otorgó la evangelización de América por
parte del imperio español, de allí que las
región donde primariamente colonizaron los españoles llevan el nombre de su fundador, como por ejemplo la República Dominicana y su capital Santo
Domingo, como la esquina de San Jacinto, Caracas, Venezuela, que es el nombre de el santo patrono de
los dominicos.
Su presencia en América data
desde 1514, apenas 20 años de la llegada de las primeras embarcaciones
españolas a América. Su
predicación a los pueblos originarios la basaban en un principio pacífico y
predicación apostólica, es oportuno indicar que de esta orden perteneció Fray Bartolomé
de Las Casas, quien denunció el genocidio indígena que cometían los españoles
sobre las etnias americanas en una cruda carta al Rey,denominada Crónica de la Destrucción de Indias, que obligó
a La Corona a tomar disposiciones de protección a los indígenas que en la
realidad no se cumplieron.
Lo Religioso
Los dominicos
llegan a Venezuela de manera pacífica, a través de la isla de Margarita que era
ya habitada por los españoles, con la explotación salvaje a los indígenas guaiqueries en el comercio insustentable
de las perlas. Para 1595 los dominicos en Caracas fundan el convento de San Jacinto, casa de formación
humanista, filosófica, idioma latín, letras, oratoria y escolasticismo y construyen un pequeño
templo que fue ampliado en toda su historia hasta cinco veces. En 1610 por
petición al Cabildo, este les otorga los solares entre Dr. Paul y Los Chorros con
acceso de agua y para la fuente benedicta de la obra de acueducto que se extendía a
esta esquina.
En 1641, un sismo derrumba
parte de su edificación, sin embargo se reconstruye, para 1661. De este seminario o convento en su templo
se efectuaban procesiones de la cultura religiosa católica, bautizada como el Nazareno de San Jacinto y en este seminario fungió como lugar de enseñanza que hace inferir para muchos como la primera universidad
del país.
Lo
político
La plaza ya se perfilaba entre
el uso religioso, como de uso de mercado popular, uso criticado y denunciado
muchas veces por los Dominicos, este mercado fue resultado del crecimiento de la actividad
comercial en la Plaza Mayor actual Plaza Bolívar que se hizo pequeño a los mercaderes y
que obligo a estos a expandirse a la Plaza de San Jacinto, es fácil presumir que en esas agrupaciones
humanas era lugar de encuentros de todo tipo, desde citas románticas hasta de tertulias políticas, iban mujeres y hombres de distintas clases
sociales, desde las altas alcurnias criollas hasta etnias afrodescendientes, indios y blancos denominado de "orilla", donde debió tener su marcado nivel
de discriminaciones y exclusiones y donde
no se hacían de esperar en sus espacios, los chismes que involucraban a las
castas más puras del mantuanaje y el prelado, hasta las jergas revolucionarias
y conspirativas contra el imperio español. Es oportuno indicar que esta cuadra colindaba con la casa de los Bolívar,
donde hoy se denomina la casa natal de El Libertador, Simón Bolívar padre de Cinco
Naciones, en su infancia debió tener estos espacio populoso como
de uso habitual, allí tras el terremoto devastador de 1812 enfrentaría la arenga de algunos religiosos dominicos
al pueblo, claramente perturbado achacando que la causa de la ira de Dios fue el
haberse rebelado contra el rey español en 1810, sin embargo Bolívar enfrentó valientemente
todo un poder político religioso con el pensamiento de la ilustración, cuando convencido del destino independiente de la patria
exclamó a viva voz: ¡si la naturaleza se opone lucharemos contra ella y haremos
que nos obedezca”.
La plaza fue visitada por el
muy reconocido Alejandro Von Humboldt, se dice que propuso en 1801 la
construcción del Reloj Solar que se ubico en la plaza en un sitio que no es donde hoy se encuentra, para 1809 el espacio oriental
de la plaza fue cedido formalmente al mercado.
El poder político de la Iglesia
Católica había entrado en crisis en el mundo occidental, su tendencia conservadora hacia la monarquía absolutista rivalizaba con los nuevos pensamientos políticos constitucionales cuya propuesta de estado laico como base de las repúblicas fue contundente, y ante las victorias de los patriotas contra el dominio español en 1821, la República decreta la "ley de extinción de conventos", y en 1828 el Ayuntamiento
ocupa el terreno hacia el este para su sede y otra para hacer una cárcel, la República
de Venezuela separada de Colombia en 1830 confirma la supresión del convento
con fecha 23 de Noviembre de 1837. Para evitar su demolición se le da uso como
casa de beneficencia, cárcel, sede policía, y la ya utilizada sede del Ayuntamiento y
mercado público.
Sin embargo, la plaza vivirá
las revueltas, alzamientos e insurrecciones entre conservadores o godos y los
liberales, en esta cárcel que ubicaron en la plaza fue apresado y condenado a
muerte en 1845, Antonio Leocadio Guzmán, líder del Partido Liberal, quien luego
se le conmutarían la pena al exilio durante el gobierno de José Tadeo Monagas. Años después durante la presidencia de Antonio
Guzmán Blanco en honor a su padre Antonio Leocadio Guzmán, cambio el nombre de
plaza de San Jacinto a Plaza El Venezolano, nombre del periódico que fundó su progenitor en 1840, como órgano informativo del partido liberal, igualmente colocó la estatua pedestre de Antonio Leocadio Guzmán en
1882, sin embargo, fue derribada y repuesta en distintas oportunidades por Joaquín Crespo, pero finalmente fue
demolida.
En el caso de la construcción
de una obra para el mercado, fue
planteado durante el gobierno de José Antonio Páez en 1845, no obstante cincuenta
años después en 1896 es cuando el arquitecto Hurtado Manrique da una propuesta seria, iniciándose
con la demolición del convento y levantando el mercado sobre los mismos
cimientos de la iglesia y del convento, aun hoy se encuentra sobreviviente de aquel pasado religioso histórico parte de la torreta, igualmente un amplio espacio lo ocupa el mercado de San
Jacinto y las tradicionales piñaterías.
Plaza
comercial
Con la entrada del siglo XX, la
Plaza El Venezolano es la plaza del pueblo, a diferencia de La Plaza Mayor que deja
de ser mercado y pasa a llamarse Plaza Bolívar, esta era visitada por la élite caraqueña, su visita debía ser en vestimenta de etiqueta, medidas sectarias en
claro desdén de los desposeídos, recordemos que es la época del pensamiento
positivista proto-victoriano (cesarismo democrático) que justificaban la existencia de un césar como Juan
Vicente Gómez una civilización o barbarie. Lo cierto es
que queda únicamente como mercado, el mercado de San Jacinto hasta 1953. Si
bien la Plaza El Venezolano se reflejaba al pueblo llano, la Plaza Mayor rebautizada
Plaza Bolívar solo podía ir en "frac o levita", "palto y corbata" y cualquiera que
pasara con artículos del mercado o que no cumpliera la formalidad era arrestado
sin miramientos, es decir que el mercado de San Jacinto y toda la Plaza El Venezolano
se había convertido en la plaza popular, las políticas reformistas debido al
voto popular y la opinión publica obligó a eliminar esta disposición.
Comercial,
Monumental y recreacional
El Gobierno Nacional el 17/10/1977, la declaró monumento histórico nacional , y desde 2004 se inició un proceso de remoción
y embellecimiento de esta plaza histórica,
y en el año de 2005 en ocasión del 19 abril se inaugura un obelisco en honor a la independencia, donde contó con la presencia del Presidente Hugo Chávez quien vio con extrañeza y curiosidad dicha estructura, actualmente San Jacinto pertenece a los espacios turísticos-históricos del casco central, igualmente la plaza se realizan actividades culturales para los hombres y mujeres de la tercera edad.
Bibliografía
Ver adjunto
y en el año de 2005 en ocasión del 19 abril se inaugura un obelisco en honor a la independencia, donde contó con la presencia del Presidente Hugo Chávez quien vio con extrañeza y curiosidad dicha estructura, actualmente San Jacinto pertenece a los espacios turísticos-históricos del casco central, igualmente la plaza se realizan actividades culturales para los hombres y mujeres de la tercera edad.
Bibliografía
Ver adjunto